El uso de las calificaciones crediticias se remonta a la década de 1950, pero se hizo frecuente durante la década de 1980 como una forma para que los prestamistas evaluaran rápida y fácilmente la solvencia crediticia de un posible prestatario. En la actualidad, los prestamistas, las aseguradoras, los propietarios, los empleadores, las compañías de servicios públicos e incluso los jueces utilizan la calificación crediticia para evaluar su comportamiento crediticio.
Hay muchos tipos de modelos de calificación crediticia que existen en la actualidad. Actualmente, el puntaje FICO y Vantage de Fair Isaac Corp son dos de los modelos de calificación más utilizados en el país. Los puntajes crediticios se basan en una fórmula matemática y pueden variar un poco del puntaje que usa su prestamista. Sin embargo, los puntajes generalmente deben estar en rangos similares y representar un nivel comparable de solvencia crediticia.
La fórmula básica de calificación crediticia considera varios factores de su informe crediticio. El impacto de cada elemento fluctúa según su perfil crediticio. Incluyen:
* Historial de pagos (40%)
* Profundidad de crédito (21%)
* Utilización de la línea de crédito (20%)
* Saldos de cuentas (11%)
* Nuevo crédito reciente (5%)
* Crédito disponible (3%)
Cuando se esté preparando para una compra importante, asegúrese de revisar sus puntajes crediticios y los informes de las tres agencias de informes crediticios: TransUnion™, Equifax™ y Experian™. Revisar sus calificaciones e informes unos meses antes de completar una solicitud de préstamo le ayudará a tener una visión completa de su salud crediticia.
Para aquellos que están preocupados por si su crédito está en buen estado, entender su crédito y su calificación crediticia es el primer paso. Si su calificación crediticia es superior a 720, es probable que califique para un programa de préstamo o tarjeta de crédito preferido. Una puntuación inferior a 650 puede significar que podrías tener dificultades para calificar para un nuevo crédito y que es más probable que pagues tasas de interés más altas.
Si su calificación crediticia es un poco baja, estas son algunas medidas generales que pueden ayudar a aumentar su calificación crediticia: pague sus cuentas a tiempo, reduzca su deuda, elimine las imprecisiones y evite nuevas consultas durante algunos meses. Además, no olvides que es posible que tu calificación crediticia no sea el único factor que un prestamista pueda tener en cuenta al evaluarte.
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